CASA KONCONSCIENCIA
Fines de semana de sanación emocional
y expansión del espíritu
Una experiencia sanadora con Emma Sibyl en su propia casa de campo, un espacio amplio y acogedor en el que convivir y compartir en grupo, con actividades de sanación emocional, autoconocimiento, relajación y conexión con el centro de nuestro Ser.
- ELI's - Experiencias de Liberación Interior que se potencian cuando se realizan en grupo. Y, de cada experiencia individual, aprendemos todos los asistentes a las mismas.
- Contacto con la naturaleza en caminatas de corto recorrido.
- Teoría y práctica de una alimentación saludable, cocinando y aprendiendo juntos con todos aquellos que lo deseen.
Estancias de uno o varios días
Estancias en la casa para recibir terapia individual con Emma, alternando momentos de ocio y descanso, con los dedicados a la práctica de sus distintas técnicas, como SIBYL, ELI Unity, Meditaciones o Esencias de Luz y Zafiros de Sri Lanka.
Una experiencia transformadora que puede marcar un punto de inflexión para quienes se deciden por ésta opción.
Consultas de terapia individual
El espacio de consulta de Emma en Casa Konconsciencia está también abierto para las personas que lo soliciten, previa reserva de cita previa.
EL LATIDO DE SEGOVIA
En Segovia el latido del corazón de los caminantes se acompasa con la belleza de sus parajes naturales, su fauna, bosques y manantiales, así como también con la riqueza cultural y monumental de sus alcázares, monasterios, catedrales o el legado de Roma que allí perdura por milenios, como en el famoso acueducto de la ciudad de Segovia.
Casa Konconsciencia se ubica en el pequeño pueblo de Arevalillo de Cega, villa y tierra de Pedraza, y muy cerca de éste que es considerado el pueblo medieval mejor conservada de Europa y a sólo una hora y media de Madrid. Por sus tierras y bosques de sabinas, enebros, encinas y pinos, cruza el río Cega que completa el nombre del pueblo. Siendo frecuente ver corzos por sus prados o buitres leonados, halcones y águilas en sus cielos. Es también famoso por sus troncos fósiles, testigos en piedra de la naturaleza que allí había hace noventa millones de años. Las sendas y caminos que recorren la zona son un auténtico placer para caminantes y amantes de la naturaleza.

